Indianas jones sin futuro
La lucha contra el expolio del patrimonio arqueológico
By Ignacio Rodríguez Temiño
Paperback
£17.00
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Looting is the main activity affecting the conservation of archaeological heritage, even over construction. This happens voluntarily and with the expectation of making private profit from public goods. Looting happens in different ways; for Spain, the main is through treasure hunters, both land (metal detectors) and underwater. This book offers an overview of looting in Spain revealing how little we know about its scope and how they affect archaeological heritage. It also analyses the social unrest provoked by the media and the legal basis and tools to fight this problem. However, this book is optimistic, from the experience in Andalucía, showing how with commitment and education it is possible to reduce the impact of archaeological looting to acceptable levels. SPANISH DESCRIPTION: La lucha contra el expolio del patrimonio arqueológico. Aunque aproveche para presentar el libro, esta entrada pasa por una serie de catastróficas desdichas que han venido ocurriendo durante los últimos días. Y es que el libro habla de expolio activo, de piteros, de piratas y de muchas otras cosas, pero existe otro expolio que se trata de pasada. Un expolio pasivo, por dejadez, incompetencia o negligencia de las administraciones que deberían velar por nuestro patrimonio. La semana pasada empezó con Facebook ardiendo por el caso de Arce (Navarra). Doscientos mil eruos de la Confederación Hidrográfica del Ebro para restaurar una capilla románica que quedó peor de lo que estaba... vamos, que se la cargaron. Tanto los arquitectos de la empresa adjudicataria (sí, arquitectos) como los de Patrimonio (que sí, arquitectos) son culpables de un expolio que va a quedar impune salvo que alguien lo denuncie. Yo no... Entonces me llegó el borrador de la nueva ley de patrimonio de la Comunidad de Madrid. Una ley express de 24 páginas que no sirve absolutamente para nada. Sr. Vicepresidente, lo que necesitábamos era un reglamento de actividades arqueológicas, no esa basura. ¿Qué es lo que más me preocupa? No la falta de definición con respecto a la práctica arqueológica, que así ya estamos, sino una ventana, infinita al expolio e incluso al aprovechamiento privado (económico) de los restos. Vamos, que esta ley es una negligencia grave. Y llegó el fin de semana con un 'arsenal' de armas de principios de siglo y una redada policial. Los comentarios a la noticia no tienen desperdicio y uno se pregunta... ¿Qué imagen tiene la sociedad de la administración que vela por nuestro patrimonio? ¿Por qué?